La dieta alcalina, popularizada por celebridades como Victoria Beckham, se basa en la idea de que consumir alimentos alcalinos puede ayudar a mantener el pH del cuerpo en un nivel óptimo y, por lo tanto, mejorar la salud y el peso. Esta dieta se originó en 1905 por William Howard Hay, quien creía que las enfermedades eran causadas por la acumulación de ácidos en el cuerpo.
Sin embargo, expertos en nutrición, como Lorena Cervantes del centro médico Naturalium, señalan que el cuerpo no tiene un pH único y que tiene sistemas propios para regular el equilibrio ácido-base, principalmente los riñones y la respiración celular.
Aunque la dieta alcalina puede llevar a la pérdida de peso debido a su énfasis en frutas y verduras en lugar de alimentos procesados, no hay evidencia científica que respalde las afirmaciones de que puede prevenir o tratar enfermedades como el cáncer.
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Fuente: Alimente + Salud, El Confidencial.